I ❤ la siesta

Como buen (galgo) español que soy, me encanta la siesta! Y no sólo puede uno echarla después de comer, no. ¡A mí me gusta disfrutarla a todas horas a lo largo del día!

Casi siempre me relajo tanto, tanto que acabo durmiendo como mami me ha sacado en la foto, panza arriba, patas estiradas, vergüenzas al aire... ¡un cuadro! Una foto, en este caso.

Y es que empieza a hacer un calor que no es ni medio normal, ¿no os parece? Si no fuera porque si me hago pis en casa me riñen, ni me movería hasta la noche. Eso sí que no me lo pierdo, ¡la juerga diaria con mis colegas perrunos en el parque!

Para que veáis que el nombre del blog no es por nada, os dejo la foto y me voy a seguir durmiendo.

Helios

Mis mamis humanas llevan dos semanas hablándome sin parar del tal Helios, las muy plastas, dicen que es mi hermano de verdad, que nacimos el mismo día y tenemos la misma edad. Que es muy guapo, como yo... ¡bagh!

Me han enseñado esta foto en la que salimos juntos. Dicen que estábamos predestinados a acabar juntos de nuevo, ¿a vosotros que os parece?

Y tienen un calendario en el que van mirando los días que faltan para ir a buscarle. ¿Y adónde? ¿A la esquina? Porque yo me mareo en el coche y lo paso fatal.
Dicen que iremos a mi tierra y que nos encontraremos con mucha gente que tiene ganas de verme. ¿Pero allí hay comida? ¿Me harán muchos mimos? Porque eso es lo que a mí me gusta.

Se preguntan si nos pareceremos y qué trastadas haremos juntos y si les haremos caso cuando corramos en el parque. La verdad es que a mí me empieza a sonar bien la idea de tener a alguien con mis ideas de conquista de comida, mimos y carreras. Alguien a mi altura y longitud.
Y esas grandes siestas que nos pegaremos juntos... lo de tener un hermano no suena tan mal... ¿no?


A ver cuántos días faltan... ¡23!